Terapia para Adolescentes
La adolescencia es una de las etapas más difíciles de la vida del ser humano. En ella intervienen muchos factores que hacen que el individuo se sienta, en muchas ocasiones, perdido, desorientado o descontrolado.
Asuntos como los límites y las normas, el cuerpo, la imagen, la elaboración de los valores propios, el autocontrol, la nueva manera de situarse ante los diferentes miembros de la familia, la defensa de la propia intimidad, la sexualidad, la amistad, los proyectos de futuro (estudios, trabajo, pareja, …), la gestión del ocio y tiempo libre, la relación con las drogas, la relación con las figuras de autoridad, la búsqueda de la propia identidad y las ideas depresivas son importantes en esta etapa que va a marcar parte del futuro del individuo.
- Apatía y falta de interés generalizada
- Desánimo prolongado o tristeza
- Ansiedad y estrés
- Manías y obsesiones
- Somatizaciones
- Descontrol de impulsos (explosiones de ira, autolesiones, ideas suicidas, etc.)
- Problemas con la familia o la comunidad educativa
- Problemas en la relación con sus iguales
- Inhibición o aislamiento
- Cambios repentinos y acusados de humor
- Dificultad para comunicarse y pedir ayuda
- Trastornos de alimentación (anorexia, bulimia)
- Trastornos de ansiedad generalizada
- Depresión
- Trastornos del comportamiento o de personalidad (trastorno bipolar, trastorno límite de personalidad, etc.)
- Fobias de diferentes tipos
- Falta de atención/hiperactividad
- Trastornos de conducta
- Esquizofrenia
- Pensamientos suicidas
« Los padres se sienten con frecuencia superados por los conflictos con sus hijos adolescentes y no saben cómo actuar para ayudarlos ”.
Desde nuestra experiencia profesional comprobamos continuamente que generar un espacio terapéutico para fomentar la comunicación sobre las situaciones que generan el malestar, tanto para los adolescentes como para los padres, es ya una descarga para el sistema.
La forma habitual de intervenir con un adolescente es concertando una primera cita con los padres para recoger la demanda y la firma del consentimiento informado, para poder aplicar al menor el tratamiento psicológico. En esta sesión se establecerá un prediagnóstico y el plan de intervención que casi siempre se lleva a cabo intercalando sesiones con el adolescente y con los padres, según necesidad. A veces también es importante trabajar con otros miembros del sistema familiar, como los hermanos.
Si observas alguno de estos síntomas o comportamientos en tu hijo/a adolescente o crees que puede padecer un transtorno psicológico, queremos ayudarte:
La adolescencia es un nuevo nacimiento, ya que con ella nacen rasgos humanos más completos y más altos.
G. Stanley Hall.